viernes, 19 de abril de 2013

19 DE ABRIL : DIA DEL INDÍGENA AMERICANO

El Museo del Hombre Chaqueño, conmemora a través de su Área de Investigaciones Históricas, el Día del Indígena Americano, resuelto por el Congreso Indigenista Intermericano, celebrado en Patzcuaro, México, en 1948.
De ese cónclave surgió una declaración , que entre otras cosas expresa:"Empobrecidos y relegados, los indígenas americanos de hoy, ya no pretenden privilegios, por su condición de primeros habitantes del continente, sólo aspiran a que se los trate como iguales, que se les reconozcan sus derechos a la propiedad de la tierra que habitaron y donde desarrollaron su identidad; la igualdad de oportunidades laborales y de estudio, y el respeto a los valores de su cultura”.
Desde aquel momento, se pronunciaron cientos discursos de distintos gobernantes, pero muy poco se ha hecho por el cumplimiento efectivo de los derechos indígenas. Durante siglo la avaricia del capitalismo, ha provocado la destrucción de sus ethos cultural, del hábitat natural donde tenían diversos formas de vida, y el exterminio de millones de seres humanos, por considerárselos de “menor desarrollo” cultural y biológico, siguiendo la tesis de Darwin de la supervivencia del más apto.
Toda la retórica verbal será vana si no hay una verdadera valoración del enorme caudal de sabiduría y valores concentrados en la cultura de los pueblos originarios, si sólo se describe su realidad, lo que es importante, pero no se la modifica.
Por ello acudimos hoy a la memoria colectiva, para reivindicar  los derechos indígenas, para hacer visible su presencia tantas veces ocultada por el hombre blanco, para que en definitiva, en el marco de la diversidad cultural del Chaco, se interactúe en diversos frentes para colocar a las comunidades indígenas en el lugar de donde nunca debieron ser desplazadas.

domingo, 14 de abril de 2013

FUNDACION Y OCASO DE CONCEPCIÓN DEL BERMEJO

En 1617, por Real Cédula de Felipe III (Rey de España) se prohibía el ataque a "los naturales" salvo contra aquellos que atacaran a las ciudades. Si bien se autorizaba el cautiverio y marcación  de los prisioneros, no se permitía venderlos ni enajenarlos.
Esta ordenanza venía a responder a la preocupación de las autoridades de Concepción del Bermejo ante la hostilidad creciente de las tribus indígenas que rodeaban la ciudad citada, fundada el 14 de abril de 1585, por Alonso de Vera y Aragón.
La primer ciudad española fundada en el Territorio del Chaco (todavía no aparecía ese nombre) llegó a convertirse en una de las prósperas y activas del proceso colonizador de España.
Creada como capital de provincia, tenía como límite al norte a Asunción, al sur Santa Fe; al oeste Santiago del Estero y Salta y La Plata (Chuquisaca) al N.O. El Primer Cabildo del Chaco contó como integrantes al propio fundador, a Hernando Arias de Saavedra (Hernandarias, yerno de Juan de Garay).
Llegó a contar en su momento de apogeo con 8,000 “indios cristianizados” y cerca de 200.000 “indios rebeldes” que merodeaban por las orillas de la misma. De su producción económica dan muestras los telares (llegaron a contarse 400 en funcionamiento ), producción de lienzo, ponchos, hilados. cera, hortalizas, cueros, vacunos, mulares , harina, carretas, maderas. (TISSERA, R.; 2008)
Las diferencias étnicas, las rivalidades internas de cada tribu, la explotación esclavista a la que eran sometidos los indígenas, las ambiciones políticas de los gobernantes españoles, la enorme extensión del territorio bermejeño, fueron algunos de los condicionantes que precipitaron el ocaso de la ciudad estratégicamente enclavada como intermedia entre el Río de la Plata y el Alto Perú.
Hacia 1613, arreciaban los ataques de las tribus “no amigas" de los blancos, encontrándose entre estas a los guaycurúes, que presionaban a los “indios mansos” para abandonar los  “beneficios” de la civilización, incluso llegaron a invadir la ciudad en tres oportunidades, secuestrando a mujeres indígenas de “tribus dóciles” como forma de convencerlos a bandonar el tutelaje criollo-español.
Los Tonocoté, los Mogosna y los Lules mansos se contaban entre los “indios amigos”. Pero lo que provocó la ira, el descontento generalizado de amigos y extraños, fue la campaña de enviar indígenas al Tucumán, disolviendo los clanes indígenas.
El malestar de los pueblos originarios fue creciendo. Mientras tanto en el plano político el Rey Felipe III dividió las tierras de Asunción a Tierra del Fuego en dos gobernaciones, una con capital en Buenos Aires y la otra en Asunción. Concepción del Bermejo pasó a depender de Buenos Aires. La distancia fue el golpe definitivo para su desaparición.
La coalición Abipón, Calchaquí, Mocoví, acompañados por otras trbus menores comenzó el asedio de la ciudad a comienzos de los años 30 del siglo XVII. El abandono definitivo se produjo tal vez en setiembre de 1632.
De haber prosperado las ideas de Hernandarias en cuanto al trabajo de inclusión e integración de los pueblos originarios, otra hubiese sido el destino de Concepción del Bermejo, y por extensión, otros los relatos históricos del Territorio del CHACÚ.

martes, 2 de abril de 2013

EVOCACION DE LA RECUPERACION DE MALVINAS

La recordación de esa gesta histórica, tan cerca de los sentimiento de los argentinos, nos invita a reflexionar acerca de cuáles fueron y son los sentimientos e intereses que giran alrededor de aquella gesta, ocurrida el 2 de abril de 1982, en plena dictadura genocida.
El silencio que siguió al 14 de junio de 1982 (día de la rendición de nuestras fuerzas militares en el campo de operaciones); el proceso de “desmalvinización”, era el intento por invisibilizar un hecho justo, no fue producto de una decisión conjunta de los sectores de decisión nacional, y por otra parte de una decisión militar, estratégicamente mal pergeñada.
Los jefes militares de aquellos sucesos se encargaron se hambrear, estaquear, torturar y hasta fusilar a los soldados que no eludieron ponerle el pecho a las balas de un ejército mucho más poderoso.
El manto de olvido que siguió a aquella gesta impidió el justo reconocimiento a los que volvieron de Malvinas, como así también a los que quedaron allí para siempre.
Los soldados ( muchos de ellos chaqueños y correntinos ), que hasta junio de ese año eran los los valientes y heroicos jóvenes, luego de la derrota militar pasaron a ser “los chicos de la Guerra”, infantilizando, minimizando de esta manera su accionar.
Posteriormente ellos fueron las víctimas de la guerra. Fueron negados, ocultados, reprimidos, excluidos, negándoseles su reinserción en la sociedad. Muchos se suicidaron. Fueron abandonados a su propia suerte, a sus propias luchas.
Esos ex combatientes han librado dos luchas –al decir de Ana Pratesi– una contra el imperialismo inglés y otra contra el olvido y la discriminación social.
La memoria se sigue construyendo, al igual que la identidad y la ciudadanía y el debate por Malvinas, ocupa un lugar preponderante.